Este disco se caracterizó por tener un sonido bastante más crudo y quizás con menos cohesión comparado con su primer disco “Ten”, pese a ello se transformó en uno de los álbumes fundamentales para el grupo.
El disco tuvo canciones que se convirtieron en grandes éxitos como “Daughter”, “Dissident”, “Animal” y “Go”, la primera alcanzó el número 1 en los Billboard de Rock Moderno y Rock Mainstream, y permaneció en esa posición durante 8 semanas.