El 19 de marzo de 2002 la banda
canadiense Simple
Plan, lanzaba su álbum debut, el cual se tituló “No Pads, No Helmets… Just
Balls”. La banda lanzó cuatro singles de este disco, y que incluyeron
colaboraciones con Joel Madden de Good Charlotte, y de Mark Hoppus de la banda
Blink 182.
El álbum alcanzó el puesto número 8 en las listas de álbumes canadienses y recibió certificación de platino. Además, en Estados Unidos llegó al lugar 35 de los Billboard 200, y llegó a la segunda posición de la lista de catálogo de ese mismo país.
El disco fue certificado doble platino por la Asociación de la Industria de Grabación de América (RIAA), lo que se provocó al llegar a vender dos millones de copias. Además, fue incluido en el lugar número 47 de la lista “The 51 Most Essential Pop Punk Albums de todos los tiempos” de Rock Sound.
El disco en general recibió buenas críticas por parte de los críticos de la música, y le abrió el camino a la Simple Plan en el mundo de la música.