Fidel Espinoza en el Senado: “soy uno de los nombres que suena para presidir el PS”

Diez días como Senador de la República representando a la Región de los Lagos lleva Fidel Espinoza y ya dice tener mucho que decir sobre el acontecer político nacional bajo la nueva administración de Gabriel Boric. Y es que no son pocas las cosas que han ocurrido: junto con el nuevo Gobierno también se mantuvo el estado de Excepción en la Araucanía y en el norte, el atentado contra la Ministra del Interior en su viaje a la Araucanía y la polémica en la derecha por la mesa de la Cámara Alta.

Pero como un águila haciéndose un panorama claro de su teatro de operaciones desde lo alto, Espinoza apunta más allá. “Efectivamente soy uno de los nombres que está sonando para presidir el partido (socialista)” reconoce. Y, claro, su nombre junto al de Juan Pablo Letelier y Arturo Barrios al parecer disputará a fines de marzo un momento clave para la histórica tienda en la que muchos dicen que se estará en juego la viabilidad misma del partido ante la irrupción de nuevas fuerzas más jóvenes. Eso sí, Fidel Espinoza asegura que “es una responsabilidad de enorme relevancia que tengo que evaluar muy bien con mi equipo político, con mi familia. Significa cosas importantes, como tener tiempo para recorrer el país desde Arica a Magallanes. Si soy presidente del Partido a mí me gustaría ser la voz del Partido en los temas ciudadanos como yo lo he hecho aquí en la Región”.

Quizás esa misma visión sea la que explique el cambio evidente en el discurso del ahora Senador. Conocido por su estilo frontal y, a veces, hasta polémico, desde su nuevo sillón en la Cámara Alta Espinoza asume ahora una postura mucho más mesurada y dialogante que la que se le acostumbraba ver, asumiendo que puede ser una buena carta de su partido para grandes cosas en el futuro.

El parlamentario estuvo presente en la polémica elección de Álvaro Elizalde como nuevo presidente del Senado en desmedro del RN Manuel José Ossandón, lo que abrió todavía más la aparentemente insalvable grieta de confianzas entre Renovación Nacional y la UDI, luego que esta última apostara por una visión estratégica apoyando al socialista en la mesa. “Me tocó ser parte de ese verdadero espectáculo que se dio porque los parlamentarios de la UDI y de Renovación Nacional debieron haber zanjado sus diferencias no en el hemiciclo. Fue bastante incómodo” se queja Fidel Espinoza. “Pero la Corporación quedó en buenas manos. Álvaro Elizalde es una persona responsable. Fue un gran vocero de Gobierno de la Presidenta Bachelet, tiene experiencia, ha sido un senador que ha marcado puntos importantes en la política nacional y, desde ese punto de vista, lo va a hacer bien como presidente del Senado, Ya se vio que en dos días aprobamos 19 proyectos de 46 que estaban estancados en los últimos seis meses. Así que fue un buen debut de Álvaro. Esperamos que le vaya bien” zanjó.

Pero no oculta el cambio hacia un discurso más integrador y mesurado al referirse a los cambios sociales que buscan impulsar el Gobierno de Gabriel Boric. “Lo que Chile pidió cunado salió a la calle fueron cambios, pero tienen que ser cambios con responsabilidad” asegura. Por eso tampoco oculta su molestia con la Convención Constitucional, donde dice “hay algunos que de verdad están radicalizando esto y están poniendo en peligro el gran sueño de los chilenos que es eliminar la Constitución de Pinochet”.

“Hemos visto algunos convencionales que tienen una agenda absolutamente radicalizada que poco menos quieren refundar Chile, como que con ellos nació este país. Y no es así. Nuestros cambios tienen que ser con mucha responsabilidad, respetando el derecho a la propiedad, respetando también a los que piensan distinto. Hay miles de chilenos que no están de acuerdo con el aborto, hay muchos chilenos que no están de acuerdo con que haya dos justicias diferentes, una para el huinca y otra para los pueblos originarios, por ejemplo. Yo soy muy respetuoso de los pueblos originarios, pero al tener dos justicias en un mismo país no me imagino que funcione muy bien la cosa” sentenció el parlamentario.

Por eso mismo no se calla al reconocer que el estallido social no hay presos políticos, sino sujetos que se aprovecharon de la ocasión para cometer delitos. “Yo no estoy de acuerdo con la iniciativa popular de norma que propone amnistiar a todos los presos del estallido social. ¿Por qué no? Porque ahí hubo personas que fueron derechamente a delinquir, que cometieron delitos graves, que fueron a saquear, que rompieron infraestructura pública y privada. Yo no estoy de acuerdo con eso. Soy de izquierda y soy socialista, pero permitir eso es abrir la puerta para que el día de mañana rompan toda nuestra ciudad cuando salgan a la calle. Yo no quiero eso para mi país. Yo quiero para mi país que cuando alguien cometa un delito sea condenado como corresponde” dijo.

Tampoco guarda silencio para calificar de terroristas a quienes perpetran hechos de violencia en la Araucanía, como el que sufrió la Ministra del Interior, Izkia Siches durante su viaje a la comunidad Temucuicui. “Si yo hubiese vivido esa situación como ministro sí hubiese presentado querella, porque esos hechos se tienen que investigar. ¿Si no vamos a permitir que en la Araucanía haya un Estado dentro de otro Estado? O, como alguien dijo por ahí ¿hay que pedir permiso para ir al ‘país mapuche’? No pues. No podemos permitir que tengamos un Estado dentro de otro Estado. Nosotros luchamos para que Colonia Dignidad se disolviera, cuando era como un Estado dentro de otro Estado” aseguró.  Pero aclara que “los que están provocando la violencia son grupos pequeños que están realizando terrorismo. Por eso yo no comparto cuando Izkia (Siches) dice que hay que dialogar con los terroristas. Yo creo que con los terroristas no hay que dialogar. Con los terroristas no se dialoga, porque ellos utilizan la vía armada, del caos, para provocar temor, desorden, en la población. Y eso está tipificado con una pena en la Constitución y las leyes de nuestro país. Eso no quiere decir que no pueda conversar con los otros grupos que sí quieren dialogar y con personas que luchan por sus reivindicaciones de tierras que son muy legítimas. Entonces, hay contradicciones, porque no se puede pedir disculpas en nombre del Estado a aquellos que fueron arrollados en su diario quehacer económico, microempresarial, como lo que pasó en Osorno mismo” concluyó Espinoza.

REVISA LA ENTREVISTA COMPLETA AQUÍ: