La Cámara de Diputadas y Diputados aprobó el articulado y despachó al Senado el proyecto de Ley de Presupuesto 2023, tras casi 22 horas de tramitación en el Congreso Nacional.
En detalle, particularmente en la partida del Tesoro Público, se rechazó completamente la asignación de casi 15 mil millones de pesos para el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) que, de no reponerse dichos fondos en el Senado, el organismo no tendrá dinero para funcionar el próximo año.
En la partida del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, se aprobaron los recursos, no obstante, se rechazó completo el Servicio Nacional de Patrimonio Cultural, que son 90 mil millones de pesos destinados a instituciones colaboradoras, entre ellas, Villa Grimaldi, Fundación Eduardo Frei Montalva, Londres 38, la Casa de la Memoria, Fundación Patricio Aylwin, la Corporación Estadio Nacional, Memoria Nacional, Fundación Salvador Allende, tampoco para el Museo de la Memoria, entre otros.
Entre las partidas aprobadas están las destinadas a los Gobiernos Regionales; el presupuesto para el Ministerio de Ciencia, como también para el de la Mujer y Equidad de Género, Deporte, Medio Ambiente, Energía, Transportes y Telecomunicaciones, Vivienda y Urbanismo, Educación y Trabajo.
También se aprobaron los recursos para el Ministerio Secretaria General de Gobierno, sin embargo, se rechazaron los 13 mil millones de pesos destinados para los gastos en personal. Es decir, no hay presupuesto para los salarios de los trabajadores de esta cartera a nivel nacional.
Una de las indicaciones que presentó la derecha, particularmente el diputado Mauricio Ojeda (ind.-PR), quien puntualizó que «esto forma parte de lo que se puede denominar ‘la grasa del Estado’, y lo digo habiendo sido seremi de gobierno: no es necesario tener personal en cada una de las regiones, basta con una vocera de Gobierno, un equipo de comunicaciones, producción, pero el resto del trabajo que hacen los voceros de gobierno en la región, perfectamente puede ser ejecutada por el delegado presidencial».
Finalmente, también se aprobaron los recursos para el Ministerio de Desarrollo Social, con una variación de un 15,9% respecto al año anterior, con un énfasis en las transferencias directas en apoyo a las familias, un enfoque en los programas de Niñez y Chile Crece Contigo, potenciar el Sistema Nacional Integral de Apoyo y Cuidados y avanza en el Plan Buen Vivir.